sábado, 28 de julio de 2007

Sobrecarga


Ayer a la tarde, mi hijo estaba preparándose la leche. Mientras llevaba la cuchara con chocolate en polvo a su taza, yo le dije: "con cuidado, atento a lo que estás haciendo".
Después de hacerlo, me di cuenta de la cantidad de veces que decimos cosas que están de más a nuestros hijos. Él ya estaba atento, ya lo estaba haciendo con cuidado. ¿Para qué tenía que recibir instrucciones mías? No las necesitaba, como tampoco necesita muchas otras de las que le doy. Voy a poner más atención a eso.

Lucas

(imagen tomada de http://www.flickr.com/photos/joshuakern/383853742/)

lunes, 23 de julio de 2007

Respetar los espacios propios




A veces miramos a nuestros hijos y sabemos que algo les pasa. Han perdido un poco de brillo en su mirada, están un poco tristes, en fin, algo no está bien con su mundo. Movidos por las ganas de ayudarlos les preguntamos una y otra vez qué les sucede, como si fuese su obligación abrir su mundo y contarnos sus penas.
La última vez que me sucedió eso, abracé a mi hijo, le dije que llorara si lo necesitaba y que no le iba a preguntar nada, sólo lo iba a abrazar.
LLoró y no me dijo palabra alguna, pero le mostré que un padre ama por sobre todas las cosas y que tambié puede aprender a respetar sus espacios internos.

Lucas

(imagen tomada de http://www.flickr.com/photos/josangel_temporal/)

sábado, 21 de julio de 2007

Preguntar

Uno es el padre y es quien toma las decisiones fundamentales en la educación de los niños. No hay duda. Pero hay tantas cosas que podemos consultar con ellos... pequeñas elecciones que les van dando la sensación de "ser parte de sus propias vidas" y no solo un muñeco que recibe órdenes de un ser supremo.

¿Qué te gustaría hacer hoy?
¿Qué ropa te gustaría ponerte?
¿Qué te gustaría almorzar?
¿A dónde te gustaría ir de vacaciones?
¿Quieres acompañarme a la casa de ...?
¿Tienes ganas de ir al cumpleaños de ...?

Cada vez que puedo, cada vez que me parece posible, dejo a Fabián que elija sobre su propia vida. Quiero que sea independiente, que aprenda a hacerse responsable de sus decisiones, a disfrutar de los beneficios que ellas traigan y a aprender de sus errores.

Lucas

Inicios...


Nada. Absolutamente nada en la vida puede compararse con la experiencia de ser padre (o madre). Nada más conmovedor, nada más pleno, nada más bello. En estos 8 años que llevo al lado de mi hijo, del ser humano que más amo en este mundo, he podido aprender más de mi mismo que en los 30 años anteriores de vida.
En este blog iré escribiendo acerca de lo que para mí ha significado la bendición de entrar en un espiral de amor ascendente e infinito. Lleno de magia, de momentos luminosos, de preguntas y de cuestionamientos que me ayudan a seguir despierto, atento al flujo de la vida. Y, por sobre todas las cosas, a disfrutar de dicho fluir.

Lucas